lunes, 17 de noviembre de 2008

17 de noviembre de 2008

Miradas Al Sur - Nota - Política - Pag. 10
El armado kirchnerista no termina en el justicialismo
UNA VARIEDAD DE FUERZAS PROGRESISTAS SE ENTUSIASMA CON EL PROYECTO K


POR ROXANA SANDÁ
rsanda@miradasalsur.com

La iniciativa de Néstor Kirchner por darle un nuevo impulso al Frente para la Victoria quedó plasmada este viernes, durante el Foro Anual de Líderes Progresistas celebrado en Chile, escenario que resultó propicio para planificar un proceso político que trascienda el peronismo e involucre a los movimientos sociales y a la pluralidad de la izquierda argentina.
Hasta el momento, y si la agenda no tuerce voluntades, las expresiones favorables del titular del Partido Justicialista a la conformación de un frente de amplio espectro se verán cristalizadas el próximo 22 de noviembre, en un plenario federal con la plana mayor de la dirigencia social y política del sector, que lo tendrá como orador en el acto de cierre.
“Hoy en la Argentina podemos decidir siendo heterodoxos, no hacemos del dogma una acción constante, pero sí creemos que el debate de ideas y principios es fundamental y permanente”, expuso frente a un auditorio de dirigentes progresistas de Iberoamérica.
Kirchner advirtió que “la política neoliberal desprestigia a la política” y enfatizó que “existe la necesidad de recuperar la capacidad transgresora de cambiar las reglas de juego”.
Mientras que para el arco opositor que encabeza Elisa Carrió los dichos del ex presidente categorizan como especie de bombas de humo, otros líderes políticos, como el referente del Frente Grande, Eduardo Sigal, entienden que el redireccionamiento de la estrategia kirchnerista resulta “un estímulo para la vida política argentina”.
El dirigente explicó que “el proceso político que iniciamos en mayo de 2003 es más abarcativo que el justicialismo y me atrevo a decir que trasciende el peronismo. Las otras culturas políticas de la izquierda que apoyamos el proyecto transformador que hoy encabeza Cristina Fernández, como el Frente Grande, el Frente Para la Victoria, socialistas, intransigentes y dirigentes sociales estamos ante la gran oportunidad de generar un espacio de carácter plural, nacional, popular y progresista de centroizquierda”.
Sin embargo, en los últimos años la realidad política del país circunscribió dicha teoría a expresiones electorales antes que a voluntades concretas de gestión. “Pero hoy están dadas las condiciones para construir un frente real de pluralidad”, contrapuso Sigal.
“Y eso demuestra en estos once meses de gestión, desde el respeto por las instituciones y por la decisión de avanzar en la redistribución de la riqueza, que se encuadran en la pelea por la Resolución 125 y el fin de las Afjp.” Que la estrategia consiste en profundizar las señales y en advertir, como sostiene Sigal, “que en el justicialismo no empieza y termina todo el espectro político”, es un eje del que viene tomando nota un arco de la dirigencia progresista vernácula, entusiasmado con el proyecto del frente kirchnerista ampliado.
Para eso se constituyó una mesa de unidad popular donde confluyen el Frente Transversal que lidera Edgardo Depetri, y el Movimiento Evita encabezado por Emilio Pérsico. Por supuesto, se piensa en Luis D´Elía como valor agregado, pero el referente principal de la Federación Tierra y Vivienda (FTV) sigue observando el tablero desde la distancia.
El plenario convocado para el 22 de este mes se plantea como ensayo para una posible autoconvocatoria en febrero o marzo de 2009.
Nadie quiere insinuar lo que Néstor Kirchner no pronuncia aún, pero se sabe que el ex presidente promueve un diálogo ampliado con el Partido Para la Victoria que referencia la ministra de Salud, Graciela Ocaña –con acciones en alza tras el relevo del superintendente de Servicios de Salud, Héctor Capaccioli–, los socialistas Ariel Basteiro y Oscar González, y el titular del Partido Intransigente, Gustavo Cardeza.
Se descuenta que también será de la partida el sector que firmó el documento Declaración del 25 de Mayo, a partir del conflicto agrario, y que en octubre último se constituyó en el Movimiento Patria Para Todos, un flamante espacio peronista que reúne varias agrupaciones políticas y sindicales junto con organizaciones sociales y centros de estudios.
De conformación ecléctica, el movimiento aglutina bajo un mismo paraguas al secretario de Comercio, Guillermo Moreno; el diputado nacional Ariel Passini; el ex legislador Daniel Carbonetto, el médico Carlos Oviedo, director del Hospital Gandulfo; la subsecretaria de Defensa del Consumidor, María Lucila Pimpi Colombo, y el secretario general del Sindicato Argentino de Televisión (SAT), Alejandro Ruiz, entre otros.
La convergencia que anhela Kirchner incluye partidos de carácter provincial y municipal, “de acuerdo con las calidades de cada región”, señalaron algunos operadores. A la fecha, ese punto se traduce en los intendentes de la provincia de Buenos Aires y del conurbano bonaerense que no se sienten contenidos en la estructura del Partido Justicialista.
Serían de la partida el intendente de Quilmes, Francisco Barba Gutiérrez; la intendenta de Pilar, Graciela Rosso; el jefe comunal de San Isidro, Gustavo Posse; el intendente de San Martín, Ricardo Ivoskus; de Mar del Plata, Gustavo Pulti, y Mario Secco, por el municipio de Ensenada, entre otros.
“La idea es que la voluntad que fuimos encontrando desde el gobierno nacional se convierta en un armado político con vida real, con debate sobre la gestión; con capacidad de intermediar entre la dirigencia y la sociedad”, coincidieron algunos dirigentes.
“Ingresamos en una etapa eminentemente política de la Argentina”, concluyó Sigal. “Hay debate de ideas y de intereses, sin renunciar a una fisonomía plural que permite albergar a cuadros y militantes formados en el peronismo, el radicalismo y la izquierda.”. (Nota correspondiente al diario Miradas al Sur del domingo 16 de noviembre).